Arqueta de Leire - Arqueta
Cofre elaborado con diecinueve placas de marfil totalmente talladas en sus caras externas. Veintitrés medallones enmarcan escenas palaciegas, de cacería, justas y animales reales e imaginarios. El resto del espacio está cubierto por decoración vegetal: palmetas, tallos, frutos y piñas así como anima...
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Datación: | 1004-1005 ([395 hégira]) |
Dimensiones: | Altura = 23 cm; Anchura = 38,50 cm; Profundidad = 23,50 cm |
Lugar de procedencia: | Pamplona-Iruña (m) |
Materia/Soporte: | Marfil |
Contexto cultural/Estilo: | Arte islámico Edad Media |
Clasificación genérica: | Eboraria |
Nombre de objeto: | Arqueta |
Inventario: | CE000038 |
Enlace al recurso: | Más información en CERES |
Arqueta de Leire - Arqueta
Cofre elaborado con diecinueve placas de marfil totalmente talladas en sus caras externas. Veintitrés medallones enmarcan escenas palaciegas, de cacería, justas y animales reales e imaginarios. El resto del espacio está cubierto por decoración vegetal: palmetas, tallos, frutos y piñas así como animales y pequeñas figuras masculinas y femeninas. La tapa tiene forma de tronco de pirámide truncada, formada por cinco placas con trece medallones historiados y una inscripción cúfica que recorre el perímetro. El cuerpo, en forma de prisma rectangular, presenta tres florones de ocho lóbulos en su cara frontal. En el derecho, dos sirvientes con espantamoscas flanquean a un personaje sentado a la oriental sobre una plataforma sustentada por dos leones, sujeta una redoma y una piña. Dentro del izquierdo hay dos personajes en similar actitud. En el medallón central, bajo el espacio reservado para la cerradura, tres mujeres tocan una flauta doble, un laúd y una alboka. En la cara posterior hay otros tres medallones. En los laterales se representan escenas de justa a caballo y sobre elefantes, en el central, un cazador se enfrenta a dos leones. En los laterales vemos dos medallones con parejas de animales enfrentados. Se trata de una obra maestra de la eboraria islámica hispana por su impecable y minuciosa factura y por la singular iconografía. Originariamente tuvo un destino áulico para guardar perfumes o joyas. Piezas como esta sirvieron como regalo entre gobernantes y posteriormente se ofrecieron como paria o tributo de los reinos taifas musulmanes a los reyes cristianos. Se empleó hasta el siglo XIX como relicario.